Conservar memorias y transformarlas en escenas de una película propia, ¿en serio hay algo mejor? Transformar una historia de amor en una consecución de escenas tiene mucho de ciencia, mucho de magia… y otra cosita, lo que provoca que el resultado sea capaz de hacer que se enchine la piel. Para que lo compruebes por tu propia cuenta, en esta entrega de Wedding Glitterati te presento a One Cameraman, videógrafo de bodas mexicano que con una propuesta romántica y muy divertida crea memorias fascinantes.
La inspiración de Arturo, One Cameraman, proviene de muchos referentes que se suman en videos con un sello muy específico, pero eso sí, siempre con la unicidad que brinda cada pareja a la ecuación. Por medio de la selección musical, esos momentos que pasan desapercibidos y la misma vibra que dejan de manifiesto los novios, los cortes y el diseño de escenas se someten a una producción en donde los aspectos técnicos son importantes, sí, pero también toda esa ola de sentimientos que se despiertan con cada segundo. Conoce más de su trabajo, dale play a sus videos y déjate inspirar por sus historias.
Nombre completo:
Arturo Rodríguez Zamora
De dónde eres:
Monterrey, N.L.
¿Qué estudiaste?
Lic. en Psicología
¿Cómo fue que decidiste ser videógrafo de bodas?
Antes de dedicarme full a las bodas trabajaba en la producción de programas de TV, cuando una amiga de la misma casa productora en la que trabajábamos me pidió que grabara su boda le dije que sí (un “sí” fácil y un tanto desdeñador).
Recuerdo empezar a filmar esa boda pensando que era un trabajo fácil y rápido me di cuenta de todo lo contrario, es un trabajo que tiene su propia metodología y arte, imposible intentar exportar las formas de la TV y Cine directo a las bodas sin alguna modificación práctica.
Nació inmediatamente en mi un reto, una necesidad de hacerlo de una forma más digna de la que estaba acostumbrado en ese entonces hace más de 10 años.
¿Cómo describirías el estilo de tu trabajo?
Estrictamente documental, altamente vivencial y ligeramente delicado algunos dirían… “suavecito”.
¿Tienes un proceso de inspiración para hacer aún mejor tu trabajo?, ¿cuál es?
Mi proceso de inspiración es super incidental, poco planeado y admito que algo desordenado, no tengo recetas.
Mi proceso es mi vida cotidiana al mismo tiempo: las canciones que escucho, la gente con la que hablo y los libros que leo alimentan lo que voy a seleccionar musicalmente, el tipo de cortes y ritmo que voy a usar en mi próximo film, los novios son constantemente víctimas de mis decisiones semanales de series, películas y playlists de Spotify.
¿Qué te interesa conocer de las parejas cuando tienes cita con ellas?
Lo primero es ver el tipo de química que tienen entre ellos, hay novios muy sonrientes y juguetones en un lado del espectro y del otro parejas muy serias y reflexivas, mi intención es respetar eso en el trabajo que hago y que se refleje en su video; lo segundo es saber si llegaron a mi trabajo por casualidad o intencionalmente buscando algo más personal, regularmente los segundos son los que se quedan conmigo.
¿Por qué consideras que tener un proveedor de video en la boda es importantísimo?
La memoria humana es altamente desconfiable y engañosa, constantemente borramos, cambiamos y desechamos recuerdos. Un video de boda (y de cualquier cosa) es la forma más cercana que tenemos a una reproducción real de los momentos importantes que queremos guardar. La competencia del videógrafo no es el fotógrafo, es el cerebro humano.
¿Cuál es tu parte favorita de la boda desde que enciendes la cámara hasta que la apagas al final?
El vals o “first dance”, muchos proveedores del evento convergen en ese preciso momento y me encanta filmar a los novios sin que se den cuenta de que estoy ahí, en esos minutos en que literalmente los reflectores están dirigidos a ellos es casi imposible que puedan concentrarse en otra cosa que no sea ellos mismos y no en mí dando vueltas alrededor de ellos y tirándome al piso, también es la parte en la que más quemo calorías.
¿Cómo consigues que cada uno de tus videos tenga un estilo tan definido y diferenciado entre ellos?
Intento soltar mi ego durante la primer parte del proceso de edición, trato de meterme en la mente de la pareja y recordar ese día, lo que más les importó a ellos, si fueron muy fiesteros me voy a enfocar más en la fiesta, si hubo mucha alegría cuando vieron a sus amigos en el “getting ready” me enfoco en eso. Trato de hacer lucir lo que ellos hubieran querido hacer lucir, mis videos son definidos y diferentes entre ellos por que mis clientes son definidos y diferentes entre ellos. Es hasta que hago el montaje y detalles que saco mi ego del cajón otra vez y le imprimo mi estilo.
¿Qué es lo más satisfactorio de tu trabajo como One Cameraman y cuál es el reto más grande de documentar una boda?
Lo más satisfactorio es la retroalimentación y las reacciones de los novios, saber que no solamente les gustó mi trabajo sino que lo van a compartir y a darle play cientos de veces y que van a guardar ese documento el resto de sus vidas me hace muy feliz, probablemente es una respuesta frecuente y hasta cliché entre fotógrafos y videógrafos, ¡pero es que es muy cierto!
El reto más grande es precisamente lograr que todos los films que hago en el año no se vean iguales y que no parezca que hago todo automáticamente.
¿Cuáles son tus bodas predilectas?, ¿qué las caracteriza?
Las que no tienen protocolos tan marcados, respeto y admiro mucho los rituales y ceremonias pero si desde el arreglo hasta la fiesta lo único que marca la pauta es el protocolo o la repetición es muy difícil documentar algo real con personalidad propia, así que entre más personalidad de la pareja y menos protocolos haya durante el día, más me sentiré estimulado y contagiado de las emociones de la gente, no solo de los novios.
¿Qué elementos tomas en cuenta para que los videos de boda tengan aún más vida y emoción en tu trabajo?
El día del evento me la paso cazando momentos humanos: risas, miradas cómplices, abrazos, etc. En la parte técnica me recargo sobre 3 columnas importantísimas: la mezcla sonora, el color y el ritmo.
¿Tienes fotógrafos o videógrafos que admires?, ¿quiénes y por qué?
Me encanta el trabajo Karla Posadas de “Kape Photography” lo que he aprendido de coloración ha sido bajo su coaching, así que cualquier queja de mis colores, quéjense con ella.
Recomiendo a cualquier videógrafo o aspirante que no solamente revisen su material con otros videógrafos, ¡atrévanse a ponerlo a revisión de fotógrafos! Regularmente son ellos quienes tienen el ojo más entrenado para encuadrar y componer.
En cuanto a videógrafos, me impresiona el trabajo de “Maru Films” son una pareja de Amsterdam que hacen un trabajo increíble, me gustaría conocerlos algún día en persona y preguntarles todo lo que me estás preguntando a mí.
¿Qué es lo que más amas de estar detrás de la cámara en una ocasión tan especial para una pareja?
Amo el balance perfecto entre hacer algo para mí y hacer algo para alguien más, es como hacer de comer para dos, pienso mucho en cómo lo que estoy grabando es tan personal para mí como para la pareja y eso es algo que no se encuentra en cualquier profesión.
¿Qué características tienen los novios que te eligen a ti como uno de los proveedores que documentarán su boda?
Me encantaría decir y presumir que todos son exactamente lo que quiero en mis clientes y que con todos establezco una magia increíble y que salen chispas cuando firmamos el contrato, pero la verdad es que hay de todo, y me gusta eso.
Tal vez algo que comparte la mayoría de mis novios es que les gusta el cine y aprecian la dedicación que le imprimo a mis films, sucede con frecuencia que en la primer cita terminamos hablando de películas y referencias de frases de cultura pop, la semana pasada el novio me dijo al terminar la cita “Arturo…haznos una propuesta que no podamos rechazar” nos reímos y no hubo necesidad de aclarar que estaba haciendo referencia a la famosa frase de Marlon Brando y Al Pacino en “The Godfather”.
¿Qué pasa por tu cabeza mientras grabas una boda?, ¿cuáles son esos detalles que no se te pueden escapar por nada del mundo?
¡Pasa de todo por mi cabeza! Aspectos técnicos gran parte del tiempo, al final del día soy un hombre y su cámara (One Cameraman) y soy medio ñoño en el aspecto técnico de las cosas.
La mitad del tiempo me preocupa el audio, las memorias SD, dónde dejé el tripié, si el aire se va a llevar el dron, a qué hora voy a hacer los backups y la otra mitad estoy corriendo para adelantarme precisamente a esos momentos que no se me pueden escapar: el primer beso de esposos, los aplausos de la gente cuando entran los novios al cocktail, las risas de los invitados en las mesas, durante la boda parezco más camarógrafo de guerra corriendo todo el tiempo que videógrafo, al final de la boda me queda de artista lo mismo que me queda de pila en la mochila, nada.
Si no fueras videógrafo de bodas, ¿a qué te dedicarías?
Probablemente médico, mi papá es médico y de niño soñaba con eso, en una realidad alternativa hay un Arturo atendiendo pacientes pero estoy seguro que ese Arturo también tiene una cámara en la mochila todo el tiempo.
¿En qué lugar del mundo te encantaría documentar una boda?
En Escocia o algún lugar de Inglaterra con castillos y paisajes infinitos, tengo un crush con la cultura Inglesa.
¿Cuál es tu más grande sueño?
¡Qué difícil! Tantos sueños imposibles de donde escoger cómo: conocer en persona a Michael Jordan, ganar un Oscar a la mejor cinematografía o descubrir una pastilla que evite engordar después de comer tacos al pastor una semana (cada uno más importante que el anterior). Me conformo con algo más terrenal, metafórica y literalmente terrenal, tener una finca de café y cultivar el grano mas delicioso y dulce de México.
¿Cómo te ves en 5 años con tu empresa?
Cosechando parte de lo que estoy cultivando de momento, logrando que mi marca sea más grande que yo mismo, sin sacrificar un milímetro de calidad y emotividad. También me veo cerrando el círculo volviendo al inicio de One Cameraman que fue enfocado en otras marcas y otras empresas, ahora exportando el estilo que he aprendido con las bodas y llevarlo de regreso al trabajo comercial.
¿Cuál crees que es el secreto de un videógrafo de bodas para no caer en fórmulas y siempre sorprender con tomas relevantes?
¡No hay secreto! Y no hay una sola forma de llegar a ese resultado, hay muchas, a mí me funciona no pensar demasiado cuando edito, si pienso demasiado tiendo a repetir. Selecciono melodías, escenas y sonidos que me erizan la piel a mí, esperando que causen el mismo efecto en otros que ven mi trabajo, si no me causa alguna emoción a mi mismo, no tiene por qué causarle una emoción a otro. Para intentar que sea relevante hacia afuera tiene que ser primero relevante adentro.
Los básicos de One Cameraman
Libro favorito: “1984”, de George Orwell, creo que debería ser libro de texto básico en escuelas que les interese formar personas con carácter crítico.
Destino del mundo que ames: San Cristobal de Las Casas, Chiapas, ese y los altos de Chiapas tienen un lugar especial guardado en mi corazón y en mi taza diaria de café.
Museo favorito: Del Prado, Madrid. Aunque cuando tuve la oportunidad de visitarlo no lo aprecié como lo apreciaría hoy (era más joven y aún más distraído) recuerdo haber sentido una opresión en el pecho de emoción al entrar y dejarme llevar por el sentimiento de melancolía al ver una sala llena de arte barroco que a cualquiera pone de rodillas.
Serie de televisión top: Mad Men, esa serie tiene en un mismo paquete 3 cosas que me obsesionan: El “look and feel” de los 60’s, el tema de las agencias de publicidad y un guión maestro.
Bandas o artistas top: Cat Stevens, The Beatles, Franz Ferdinand, Gustavo Cerati, Mando Diao, Beck, Jumbo. Me niego a explicar la razón de mi gusto por cada uni por que esto dejaría de ser una entrevista y se convertiría en una autobiografía.
Canción que te inspire muchísimo: “Perdonar es divino”, de Gustavo Cerati, es la primer canción que pongo cuando manejo por carretera, me lleva a lugares infinitos en mi mente.
Película de arte que podrías ver una y mil veces: “Memento”, de Christopher Nolan, no sólo por que es una “masterpiece” sino por que es necesario verla varias veces para apreciarla y tal vez entenderla, al menos para mí que no entiendo las cosas a la primera.
Obra de arte que te haya enamorado: “La noche estrellada”, de Vincent Van Gogh, es la primera y hasta ahora única obra que me ha hecho derramar una lágrima al tenerla en frente.
¡Contacta a One Cameraman!
Website: https://www.onecameraman.com/
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Vimeo: One Cameraman
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