Cambiar las reglas me parece esencial en una boda, siempre y cuando estas directrices vayan acorde con la personalidad de los novios y lo que desean ver en uno de los días más especiales de sus vidas. La historia de amor de Fernanda y Aldo es una de aquellas que merece verse y admirarse por horas; no solo por la belleza de una celebración transformada en un paraíso perdido, sino por ese amor que salta a la vista en cada imagen. A través de esta boda real descubrirás que todos esos sueños albergados en tu cabeza pueden hacerse realidad, con tan de decir “sí, acepto” en un entorno que te refleje, en el que te encuentres y en donde esa unión se maximice en cada acento. No te puedes perder esta boda en Jardín Agua Viva, un venue de bodas que, además de su encanto, se ha dado a conocer por el amor hacia lo sustentable y hacia un contacto pleno con la naturaleza. Las fotos de Ana Hinojosa ¡son un lujo!
Un par de botas rojas no le caen mal a nadie
Y bajo esa perspectiva, el look de los novios se convirtió en un acento inmejorable que habría de cambiar el esquema de la boda. Fernanda se decantó por un vestido de novia de inspiración bohemia con mangas poetas sobrepuestas y una línea de lo más sencilla, un diseño del creador mexicano Kris Goyri. Para acompañar su look, nada mejor que un peinado casual y sin complicaciones, así como un maquillaje on point hecho por la dupla Sebastian Rivera y Viris Villarreal, armonizado a la perfección con los derredores de ese maravilloso lugar enmarcado por naturaleza. Evidentemente, el estilo se dejó de manifiesto a la distancia con un par de botas rojas altas con las que Fer caminó hacia el altar para dar el “sí, acepto”. Un aspecto brutal en la inspiración de la novia fue la presencia de María Félix, una de las actrices y personalidades que se encargó de transformar la escena con ese porte y la elegancia tan característica de los años 50.
Al respecto de su look, Fernanda dijo lo siguiente: “Desde el principio sabía que quería estar muy cómoda y quería un elemento de tono rojo o coral. Busqué por todos lados lo que tenía en mente sin mucha suerte. Mi obsesión era muy rara porque no me dejó quitar el dedo del renglón. Casi un mes antes de la boda encontré en eBay mis botas. Colección 2017 de Isabel Marant, ya agotadas. Las pedí y por cosa de magia llegaron tan solo 2 días antes de casarnos”.
Aldo, por su parte, eligió un traje en color azul de lo más cool, el cual acompañó con una camisa estampada y con un boutonniere que marcaba el contraste perfecto. Más allá de su gusto y del estilo proyectado por ambos, lo que más me gustó de esta boda fue que en todo momento Fer y Aldo fueron fieles a su estilo. Nada de reglas ni de imposiciones; todo hecho a medida… por ellos.
La ceremonia… como debe de ser
Uno de los elementos clave en la boda de Fer y Aldo fue crear experiencias en las que todos los sentidos pudieran convivir de cerca. “Lo más importante fue mantenernos reales y honestos a quienes y como somos. Después de la unión civil, cada uno dijo sus votos y lo que significaba ese momento, después nuestras hijas nos enlazaron y seguido de esto un grupo de amigos y familia, que nos conocen juntos y ha apoyado lo nuestro desde el primer día, dedicaron unas palabras para casarnos también. Fue increíble las niñas, mis papás, nuestros hermanos, nuestros mejores amigos. Todos compartieron un poco de su corazón para unirnos un poco más”, dicen.
Para que cada momento de la ceremonia fuera aún más especial, Fer y Aldo sabían que una locación envuelta en naturaleza y con la infraestructura perfecta para una boda era esencial. Con todos esos recursos a su alrededor, y tomando como base su amor por la ecología y el contacto con la naturaleza, cada detalle fue aún más significativo en este día.
“Jardín Agua Viva tiene una belleza impresionante que para nosotros era imprescindible. Arreglado de una forma muy natural hizo que la decoración fuera mínima y resaltara en todo sentido. El espacio de la ceremonia que es circular también fue bien importante. Todo lo demás fue gracias al cariño de la gente que nos ayudó a preparar todo y a los invitados”.
La boda inspirada en Great Expectations
¿Hay algo más interesante que una boda inspirada en una película? Supongo que no. La concepción estética detrás de la boda de Fernanda y Aldo fue espectacular, empezando por esa traducción visual de un paraíso perdido y haciendo remembranza de “esa mansión decadente sumergida en el tiempo y en todo tipo de verdes y plantas que se quedó grabada en mi memoria para siempre. A la hora de diseñar la boda lo único que tenía en mente era ese lugar, ‘Paradiso Perduto'”, cuenta Fer.
Para lograr una visión tan específica y con tanta ruptura de esquemas de por medio, qué mejor que Fernando Gutiérrez y todo el equipo de Gutierrez F Studio. Ellos se dieron a la tarea de aterrizar cada una de las ideas con el fin de crear declaraciones impactantes desde cualquier perspectiva. La gama de tonalidades fue fundamental para combinar con la esencia de Jardín Agua Viva y, para ello, los toques de colores tierras, las flores secas, las plantas y todo tipo de verdes se unieron en una ecuación de estilo ideal. Por supuesto que nada hubiera sido posible sin la creatividad de Ana Paula Lavín de By Allegra que, a través de espectros y tintes anaranjados, morados, verde olivo y cafés se encargó de diseñar una escena maravillosa para celebrar el amor de Fer y Aldo.
Los elementos decorativos y con un significado especial no faltaron en esta gran boda. “Escogimos 5 tótems de Aldo y 5 piezas textiles mías, decidimos que el proceso artístico de cada uno debía de estar presente ya que ambos vemos lo que hacemos como una meditación. Es lo más honesto que podemos hacer para celebrar el momento”, dice Fernanda. Pon mucha atención a estos 12 tips para planear la boda perfecta.
“La boda fue básicamente una extensión de nuestro día a día en el formato de una fiesta”, dijeron los novios. Esta frase me fascina y marca la forma ideal de una celebración perfecta. Al final de cuentas no son los compromisos ni las expectativas externas lo que debería marcar el camino creativo y de inspiración de un día tan especial, sino el compromiso por reflejar una visión en conjunto, una creación de la cual ambos sean los autores intelectuales. Sin repeticiones. ONE OF A KIND!
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Una fiesta sin precedentes
Cada momento en la boda de Fer y Aldo debía tener un propósito, como la recepción. Para seguir con la ruptura de reglas, los novios apostaron por un diseño distinto a la hora de la comida, y es que de acuerdo con ellos “nosotros les pedimos que la comida fuera al centro, nada de 5 tiempos que después el invitado ni se come y se desperdicia. También les pedimos que se lucieran con comida mexicana sin caer en el taco y la tortilla nada más y confiamos en ellos en su totalidad. La sorpresa fue grande, todos los invitados nos mencionaron lo rico que comieron, lo agradable de que no fuera en tiempos y que cada quien se sirviera solo lo que quería. Fue súper importante la dedicación que hubo por parte de su chef en como lo sirvieron”.
La experiencia sensorial fue básica a cada segundo. Además de la propuesta tan original en la ambientación del lugar y hasta en el look de la novia, la música también debía llevar un sello diferenciado que se destacara. Fer y Aldo cuentan que, sin lugar a dudas, uno de sus momentos preferidos fue que los invitados no dejaron de bailar ¡en ningún momento! Los ritmos se basaron en los años 60, 70 y 80… “una mezcla desde The Smiths, Leonard Cohen, Donna Summer hasta Polo & Pan y Nicola Cruz”, dicen. Gracias a DJ Pepper lograron que todo funcionara a la perfección para mantener la buena vibra en todo momento.
Una boda en la que se distinguieron los buenos momentos, un estilo genuino y la oportunidad de crear escenarios impredecibles con el amor de tu vida. La historia de Fer y Aldo cobra aún más sentido con esta celebración que conjuga la mejor experiencia para los sentidos, una ambientación envidiable, la propuesta de color más original y, por supuesto, el ingrediente clave del todo: el amor. No pierdas detalle de cada una de estas fotografías y, si necesitas más inspiración, recuerda que en la sección Real Weddings encontrarás cientos de historias fascinantes y bodas muy cool.
Fotografía: Ana Hinojosa | Venue: Jardín Agua Viva | Wedding Planner: Gutierrez F Studio | Diseño floral: By Allegra | Vestido de novia: Kris Goyri | Catering: Red Kiwi | Música: DJ Pepper | Maquillaje y peinado: Sebastian Rivera y Viris Villarreal